Edén Parque Vacacional es perfecto para familias y estancias más largas
Como ya sabrá cualquier viajero, el hotel puede ser la mejor o la peor parte de unas vacaciones. Con esto no quiero decir que todo el mundo debería ahorrar cada céntimo para poder permitirse una semana en un resort de lujo. Es cierto que en algunos casos se elige un hotel con spa, piscina y restaurante gourmet para pasar las vacaciones, pero en otros casos, la idea es encontrar un sitio limpio y cómodo para pasar la semana mientras vas explorando la ciudad. A veces viajas con la familia, otras veces es una escapada de pareja, o un viaje de trabajo. Nosotros visitamos el Parque Vacacional Eden en Puerto de la Cruz (Tenerife) para pasar nuestra luna de miel. Para seros sinceros, elegimos el hotel gracias a un amigo íntimo que lleva varios años trabajando en el hotel. Él lleva bastante tiempo animándonos a visitarlo y esta era la oportunidad perfecta. (Lo digo ahora, para ser completamente transparente, pero como siempre, haré lo que pueda para compartir nuestra experiencia con la mayor franqueza posible.)
Aterrizamos en el aeropuerto de Tenerife Norte donde decidimos coger el autobús público (la guagua) hasta Puerto de la Cruz. El otro transporte posible es coger un taxi que te costará entre 30 y 40 euros. Aunque es verdad que se puede visitar la isla sin coche a través de visitas guiadas, packs vacacionales y autobuses, recomendamos alquilar un coche durante tu estancia. Cuando llegamos al hotel, nos dijeron en la recepción que el Parque Vacacional Eden tiene un acuerdo con una de compañía local de coches de alquiler con unos precios muy asequibles. Nosotros pedimos uno para que estuviera listo a partir del día siguiente.
Mis primeras impresiones del Parque Vacacional Eden fueron bastante distintas a lo que esperaba, más que nada porque esperaba un hotel y en realidad son apartamentos con muchos de los servicios propios de un hotel. Cada apartamento tiene una cocina con una mini nevera y hay un pequeño autobús que, de manera gratuita, va desde el hotel hasta la base de la colina donde hay un supermercado. Y sí, el hotel se encuentra en la parte alta de una colina enorme, pero no os preocupéis, un viaje en taxi desde el puerto sólo vale 3 euros y no estoy exagerando; ¡son tres euros bien aprovechados!
Como nos habían dado el equivalente a una suite de luna de miel, cuando llegamos a nuestra habitación había flores y cava esperándonos. Nos comentaron que pronto será una opción para cualquier cliente, en el caso de que quieran añadir un detalle especial a sus vacaciones. Nos impresionó mucho la decoración de la habitación. Era muy moderna, con líneas limpias y todo muy bonito y fresco. Al otro lado de la habitación había una terraza con una mesita y sillas para poder disfrutar de las vistas de las montañas por un lado y el mar por el otro. La habitación también disfruta de una cocina, un cuarto de baño bastante grande con un fregadero doble, y una televisión con canales disponibles en varios idiomas (concretamente en español, inglés y alemán). Creo que nos impresionó tanto la habitación porque el Parque Vacacional Eden está en proceso de reformas. Aunque la zona de recepción está muy limpia, la decoración es claramente de otra época y me recordó a un resort donde fui con mi familia en Florida en los años 90. Las moquetas de los pasillos (que nos aseguraron que se iban a cambiar dentro de poco) también estaban bastante gastadas. La habitación, en cambio, era un respiro de aire fresco y si las reformas siguen esa misma línea, ¡seguro que el resultado final será genial!
Tras acomodarnos en la habitación dimos una vuelta para situarnos un poco. Bajamos por una de las numerosas sendas bordeadas por la flora y fauna de la región y llegamos al comedor. Cada día el comedor ofrece un buffet de desayuno, comida y cena. Exponen durante el día lo que ofrecen para la comida y la cena, así luego puedes decidir si comes en el comedor, cocinas en tu habitación o comes fuera.
Como estuvimos fuera explorando la isla casi todos los días no tuvimos la oportunidad de comer y cenar en el hotel, aunque sí disfrutamos del desayuno una de las mañanas y podemos decir que el buffet era muy completo para los gustos generales. Entre los planes futuros se encuentra el de incluir un pequeño “rincón del café” para la gente que tenga que madrugar (para un vuelo temprano o una excursión al parque nacional del Teide) y que constará café, zumo, bollos y sándwiches.
Asimismo hay un pequeño bar al lado del comedor principal donde puedes pedir algo para picar mientras está cerrado el comedor. Además está abierto por la tarde/noche para poder tomar algo después de estar fuera todo el día haciendo turismo. Os vuelvo a comentar que la decoración del bar y del comedor está un poco pasada de moda, con muchas flores y muebles de mimbre. De todas formas, todo estaba limpio y la gente que trabajaba en el bar y el comedor se mostró muy simpática, aunque un poco relajada en su servicio.
El Parque Vacacional Eden también nos ofrece varias piscinas. El complejo tiene un total de tres piscinas, una de las cuales tiene cubierta para el invierno y se calienta hasta los 23 ºC. La piscina más grande mide 25×10 metros y se encuentra justo al lado del bar y los jardines del hotel en la primera planta de Eden Luz. Fue la piscina que más frecuentamos porque estaba más cerca de nuestra habitación y porque no había tanta gente. Hay también una pequeña piscina para niños justo al lado de la más grande que mide 6,95 x 4,54 metros.
También pasamos tiempo en la piscina que se encuentra en la 5ª planta del segundo edificio, el Eden Esplanade. La piscina es más pequeña (18 x 10 metros) pero desde allí se puede disfrutar de las vistas del mar, ya que está más alta. La única posible desventaja de esta piscina es que suelen haber más niños jugando. Claro que si vienes a pasar una o dos semanas con los niños, seguro que encontrarán nuevos amigos (¡y a lo mejor hasta practicarán su alemán o español!) Lo que más nos gustó de esta piscina fue la ping pong al lado de la piscina misma. Con un depósito de 5 euros en recepción, te dejan las palas y una pelota de ping pong. El depósito te lo dan de nuevo al devolver las palas, pero mientras es una manera genial de tener un poco de competición amistosa al lado del agua.
Por último hay una piscina nudista en la décima planta del edificio Eden Esplanade con vistas preciosas, aunque no disfrutamos de esta parte del hotel. La piscina mide 10 x 8 metros y está abierta exclusivamente para los clientes del hotel conformes con las normativas de la piscina.
Creo que uno de los puntos más impresionantes del hotel es su jardín de 12.000 metros cuadrados. De hecho, el hotel se ha llevado un premio por sus extensos jardines. Las flores son preciosas y asombrosas, pero lo que más nos llamó la atención fueron las lagartijas pequeñas que salían corriendo desde muchos puntos de la senda. No te hacen daño, pero claro, ¡no son algo habituales ni en Madrid ni en Nueva York! También vimos unos gatos domésticos muy cariñosos y unos gallos durante la visita, que no causaron ninguna molestia.
El Parque Vacacional Eden también ofrece sauna y masajes con expertos. Tienes que pedir cita para esto con antelación, y no tuvimos la oportunidad de disfrutar de este servicio del hotel. Por otro lado podréis gastar vuestro tiempo libre con otras actividades como: un parque para niños, minigolf, ajedrez en el jardín, tenis, petanca, ping pong, billar o clases de pilates. Hay música en directo (dependiendo de la época del año) dos veces por semana. Tuvimos un poco de mala suerte, ya que no ficharon ningún músico durante la semana de nuestra estancia en el Parque Vacacional Eden.
Tenerife se considera como “la isla de la primavera eternal” y disfruta de un clima genial durante todo el año. Esto, combinado con la variedad de flora y fauna, los parques nacionales, el Teide y las playas bonitas te dan razones de sobra para hacer del Parque Vacacional Edén vuestro destino. Aún así, cómo he mencionado al principio de este artículo, es importante considerar qué tipo de experiencia de hotel se quiere tener, ya que existen más hoteles en Tenerife Norte. Queremos dejar claro que el Parque Vacacional Eden no es un resort, sino una comunidad de apartamentos vacacionales con muchos de los servicios asociados a un hotel. A día de hoy, los apartamentos no tiene aire acondicionado (aunque por la noche se refresca bastante), y las habitaciones no tienen WiFi (aunque tienes acceso a internet en recepción). Es muy recomendable para las familias que viajan con niños y el cliente habitual suele ser muy independiente, así que no te sentirás agobiado a pesar de la alta capacidad del hotel. Ruskomendamos el Parque Vacacional Eden con 4 boquerones y estamos deseando ver cómo quedan las reformas en las próximas temporadas.
