Índice: Comidas de Andalucía
Una de mis razones para viajar es sin duda la gastronomía. Siempre que viajo a un destino, probar la cocina local es obligatorio. Ya sea preguntando, investigando o dejándome llevar, en cada viaje me aseguro de buscar restaurantes y cafeterías con encanto. Las comidas de Andalucía ofrecen montones de recetas y platos riquísimos, lo que hace que casi cada ciudad y pueblo tenga su propia gastronomía (tanto a nivel de platos salados, postres y vinos). ¡Sin duda Andalucía tiene algo para todos los gustos!
¿Quieres saber cuáles son mis 10 comidas de Andalucía preferidas? ¡Allá vamos!
Salmorejo
Podría estar comiendo salmorejo todos los días y tanto Abby como mi madre lo hacen buenísimo. Es un plato típico de Córdoba y es tan sencillo como rico. Sus ingredientes son unos buenos tomates, aceite de oliva, pan, ajo y sal. Luego puedes añadirle la gracia del jamón y el huevo picado por encima si quieres. Por supuesto se come frío y es una de las comidas de Andalucía obligatorias en verano. Personalmente, acompaña muy bien con una buena tortilla de patatas (¡con cebolla!)
Flamenquín
Ya que estamos por Córdoba, te presento otra de sus delicias gastronómicas. Lleva como ingredientes carne de cerdo, jamón serrano y queso, todo enrollado, rebozado y bien frito. Siendo esta la receta original y la que yo siempre pido, existen flamenquines con ciertas variaciones en el tipo de queso o carne para cambiarle un poco el sabor. Si visitas Córdoba lo vas a poder encontrar en cualquier restaurante de la ciudad. El mejor flamenquín que he probado ha sido en una pequeña venta a la afueras de Montilla (Las Camachas).
Espetos de sardina
Si haces una escapada a Málaga y paseas por la playa, encontrarás los famosos chiringuitos. En ellos siempre hay una barca llena de arena, un buen fuego y palos con sardinas haciéndose a la brasa. Y es que pocos placeres hay para mí mayores que una cervecita fresquita, mis buenos espetos y el sonido del mar de fondo. Los espetos pueden ser de cualquier pescado (la acción de espetarlos es hacerlos en un palo a las brasas), pero los más típicos son los de sardina. ¡Por supuesto, se comen con las manos!
Tortillita de camarones
Otro de los manjares de la costa, en este caso de Cádiz, es la tortillita de camarones. La idea es sencilla, pero hay que saber ejecutarla. Los ingredientes son harina de trigo, harina de garbanzo, agua, sal, cebolleta o cebolla, perejil y camarones vivos. Con todo eso se hace una masa y se fríe de la manera correcta. Los puedes pedir en cualquier bar de la ciudad, y si en algo es experta Cádiz es en el arte de la fritura. Un sitio que recomiendo es Freiduría Las Flores en el centro.
Serranito
Aunque mi padre es sevillano, tiene delito que la primera que me introdujera los auténticos serranitos fuera Abby. Me parece una combinación tan simple y deliciosa, que estoy enamorado. Se trata de un pitufo (pulga, bocatín o como queráis llamarlo) relleno de lomo de cerdo, jamón serrano y pimiento verde frito. Algunas veces añaden un huevo frito, pero a mí personalmente me parece ya demasiado. Mi sitios preferidos son En la Espero te Esquina y El Menta, aunque el primero lo probé en el ya turístico y venido a menos Patio de San Eloy.
Gazpacho
Con el gazpacho entramos en palabras mayores, ya que es la bebida oficial del verano en mi casa desde que tengo uso de razón. Podríamos decir que es una sopa de tomate, pero va más allá, sobre todo si le añadimos picatostes, pepino, cebolla y pimiento verde. Mi padre se lo toma en vaso sin más y yo en un cuenco con todos los tropezones; para gustos los colores. ¡Lo importante es usar buenos ingredientes y el calor veraniego se hará más liviano!
Pescaito frito
Este plato lo podemos encontrar en toda España, pero sin duda alguna se disfruta mejor en un bar de Cádiz y Málaga, sobre todo si tenemos el mar en frente y una buena cerveza en la mano. La clave aquí en un tanto por ciento muy alto es la elección del aceite y alcanzar la temperatura correcta. Si escatimas en estos puntos tendrás las malditas versiones aceitosas y las fritangas. Antiguamente comíamos también chanquetes y morrallita, pero por respeto, no debéis ya encontrarlas, ni aceptarlas en el caso de que las tengan.
Rabo de toro
Este es uno de esos manjares que he tardado años en apreciar. Cuando era pequeño mi madre lo hacía mucho, sobre todo porque a mi abuela le encantaba, pero no conseguía encontrarle la gracia. Con los años, lógicamente esto cambió. Normalmente se come en guiso, donde el rabo de toro es cocinado con mucha paciencia a fuego lento con tomate, vino y cebolla. Si no se cocina lo suficiente quedará duro. Lo puedes encontrar en toda Andalucía, aunque en Sevilla y Córdoba lo hacen muy bueno.
Jamón de Huelva
Es cierto que hay muchas zonas de producción de jamón ibérico de bellota y que seguramente una de las más conocidas en Andalucía sea Jabugo. Yo le quiero rendir homenaje a la tierra de mi abuelo paterno, Aracena, donde junto con Trevelez en la Sierra de la Alpujarra, he comido el mejor jamón. Aracena de hecho es parte de la DOP Jabugo que exporta jamón a todo el mundo. Si vais a un bar o restaurante y tenéis la oportunidad, pedid esta delicia y cerrad los ojos para sacarle todo el sabor.
Piononos
En la parte de postres estaba entre varios, pero finalmente me he decantado por las raíces de mi madre, transportándome hasta Santa Fe (Granada). Los piononos (en honor al Papa Pio IX) son unos pequeños dulces hechos con bizcocho y que están enrollados, emborrachados en un jarabe, rellenos de crema y finalizados con una crema tostada con soplete encima. Los vais a encontrar en cualquier pastelería de Granada y os recomiendo comprar unos cuantos. En resumen, están buenísimos y son muy adictivos.
¿Has probado otras comidas de Andalucía y tienes nuevas recomendaciones? Estoy encantado de escucharlas y sobre todo probarlas.
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