El barrio de Soho en Málaga está justo detrás de la calle principal de la Alameda en el centro histórico. Pedro te diría que esta zona antes era algo solitaria y no precisamente el lugar para dar un paseo tranquilo o tomar un café. Sin embargo el barrio ha cambiado mucho en los últimos años gracias a la iniciativa de convertir Soho en el barrio artístico de la ciudad. Lejos de ser peligroso, ahora es el punto ideal para ferias de artesanía, hoteles boutique, calles anchas peatonales, cafés estilo hipster y una gran cantidad de murales. Bienvenidos al nuevo Soho Málaga (y sí, como antigua residente de Nueva York, me hace bastante gracia el hecho de que Málaga no queda nada cerca de Houston Street).
Si vas a dar un paseo por Soho, sugerimos que cruces el río desde el Barrio del Perchel, llegando justo al museo CAC. No tiene pérdida ya que el puente está pintado con los colores del arcoiris por un artista llamado Pantone. De hecho es un diseñador que trabaja mucho con las formas geométricas y los colores, de allí el nombre de Pantone. El artista es de Argentina, aunque vive actualmente en Valencia. Irónicamente no se dedica a pintar murales normalmente, sino muebles. Esto es algo único sobre el arte callejero del Soho; cuando la ciudad pide que vengan artistas a decorar las paredes del barrio, no sólo lo hacen con la colaboración de artistas callejeros, sino también con artistas de otros campos. El resultado, tengo que admitirlo, es maravilloso.
Si miras al propio río, verás las paredes cubiertas con graffitis de diferentes artistas. Este es el resultado de una iniciativa de la ciudad de dejar que los artistas plasmaran su marca personal en el río. Solo tenían que elegir entre un fondo negro o blanco, para luego firmar libremente con los colores que ellos desearan. Podría parecer estúpido pintar murales en el propio río, pero esta parte del río casi siempre está seca. Solo se ve agua cuando abren la presa después de fuertes lluvias. Además, por otro lado, el arte de la calle siempre ha sido un arte transitorio que con el tiempo desaparece o se transforma, algo que los propios artistas saben.
Detrás del CAC verás dos murales enormes, quizás los dos más famosos de Málaga o por lo menos los más fotografiados. El de la derecha es del artista Shephard Fairey. Es conocido por usar una plantilla para pintar una cara con máscara por las paredes de varias ciudades de los Estados Unidos. Como artista político, también agregó la frase “Obey the Giant” (Obedecer el gigante). En la misma línea, se ve que los colores que escoge y la estética recuerdan los pósteres socialistas.
El otro mural en el edificio vecino es de D-Face. Como podréis ver, el artista fue influenciado claramente por los dibujos animados y las obras de Roy Lichtenstein. D-Face siempre se interesa por la descomposición y el contraste entre lo bueno y lo malo. En este mural se ve que uno de los ojos es rojo y el otro azul. Es interesante ver obras tan distintas a tan gran escala.
En el colegio al lado hay un mural hecho por el grupo Boa Mistura (la buena mezcla). Ellos trabajaron junto con artistas locales para pintar una frase en las paredes del patio. Los invitaron a pintar lo que quisieran en las paredes y luego Boa Mistura pintó en blanco sobre las obras para revelar una frase: “El poder de la imaginación nos hace infinitos.” La idea era que todos trabajaron en conjunto para producir la obra de arte.
Según continuas por el barrio hay murales al girar cada esquina. Verás los personajes barbudos de David Drucall, siempre intentando reflejar el tema de la humanidad en sus obras. A la vuelta de otra esquina verás un camaleón gigante y a unas manzanas unas ardillas algo feas que escalan un edificio. La frase “Piensa un Deseo, Ama lo que haces” nos recuerda que hay que perseguir nuestros sueños.
Uno de mis murales preferidos está en la Calle Tomás Heredia. Es de un hombre que parece que está pintando la pared para cubrir un graffiti, pero en realidad su pintura es de colorines al estilo de Jackson Pollock. Hay muchos más murales en Soho Málaga y cada día aparece uno nuevo. Pero si pudiera daros un consejo sería mirar siempre hacia arriba. Unos de los murales más chulos se encuentran en las paredes de los edificios más altos. Por ejemplo en un edificio se ve un pájaro gigante con muchos más pájaros pequeños volando. Está basado en los pájaros que el artista vio en la Alameda Principal. Al final es un reflejo de Málaga misma, conjuntando perfectamente el arte y la vida cotidiana.
