Toledo es una ciudad cargada de leyendas y mucha magia. Con Rutas de Toledo hicimos el «free tour» y también descubrimos las brujas y artes oscuras.
Toledo es una de esas ciudades cargadas de misterios, leyendas y anécdotas que pasan de generación en generación y que no todas se pueden encontrar en Internet. Últimamente nos estamos aficionando a combinar durante nuestro viajes el ir por nuestra cuenta con coger algunas visitas guiadas que nos complementen lo que vamos viendo. Casualidades de la vida, llámale destino o la magia que Toledo posee, la empresa a la que contactamos su dueño nos reconoció porque fue antiguo cliente en Auténtico Nueva York. ¡Menuda sorpresa y casualidad! La verdad es que las críticas de su empresa, Rutas de Toledo, no podían ser mejores, así que la elección ya estaba hecha.
Ruta de Toledo mágico
A decir verdad realmente contactamos porque me obsesioné con hacer la ruta de los templarios y así fue como llegué a Rutas de Toledo. Al llamar me dijeron que no estaba disponible, pero que seguramente me podría interesar la ruta de “Toledo mágico”. Me explicó de qué iba y la verdad es que nos llamó la atención y nos apuntamos. Eran las 8 y media y el guía se presentó metiéndonos la emoción en el cuerpo. Se notaba que amaba lo que hacía desde el primer momento y eso apuntaba bien.
Su primera pregunta fue – ¿sabéis por qué conocen a Toledo como la “ciudad de las tres C’s”? Nadie lo sabía. “Por sus cuestas, curas y cadetes”, respondió él. No le faltaba razón, madre mía qué cantidad de cuestas tiene Toledo. A veces da la impresión que solo hay cuestas arriba y que nunca bajan como si fuera un juego imposible de Escher. Lo de los curas y cadetes no lo vimos tan obvio, pero si te ibas fijando los primeros aparecían, y supongo que los segundos será según la época.
La ruta de Toledo Mágico no es la típica ruta histórico o turística, y así nos lo hizo ver desde el principio. Es una ruta guiada a través de sus leyendas e historias increíbles, basadas en la documentación que se ha ido recogiendo. De hecho el guía, que sabía un montón, nos hacía ver cuando algo era una historia con fundamento y cuando era una teoría o leyenda que se ha ido pasando de unos a otros. Así, durante dos horas callejeamos por Toledo parándonos en aquellos puntos donde alguna leyenda había ocurrido.
Toledo es conocida por su magia, y no solo desde el punto de vista artístico, sino de las artes oscuras que se sabe han practicado en la ciudad. Mientras paseábamos nos iba diciendo aquellas calles y casas donde se sabía que había curanderas, hechiceras o se hacía brujería. Una de las primeras señalizaciones que nos hizo respecto a esto es la diferencia entre hechicera y bruja. Las brujas obtienen sus poderes mágicos gracias a un pacto que han hecho con el diablo, mientras que las hechiceras obtienen sus poderes gracias a rituales, hechizos y a su conocimiento. Esto quedó remarcado durante la Inquisición, en donde las brujas eran quemadas y a las hechiceras solo se les desterraba.
Historia tras historia, y leyenda tras leyenda, el guía nos tenía totalmente entregados. La forma que tenía de narrarlo, su conocimiento y el ambiente que nos envolvía hacía de la ruta un momento único. Y es que Toledo de noche se transforma totalmente. Uno de los momentos cuya leyenda más impresionó fue en el callejón del infierno y el callejón del diablo. Se cuenta que en esa calle había una bruja cuya casa se quemó de una forma tan extraña que todos creyeron que era obra del mismo diablo.
Para terminar, Rutas de Toledo tiene el permiso para entrar a una casa privada donde bajo sus suelos se encuentra una enorme cueva. Bajar ahí da escalofríos y sus paredes esconden miles de historias. El guía nos contó allí debajo alguna de ellas y nos dijo que mucha gente había pedido salirse porque una energía negativa no les dejaba estar allí. En nuestro grupo no se dio el caso, pero sí que es verdad que no quisiera quedarme allí encerrado. Poco después la ruta terminaba y todos quedamos enamorados un poquito más de esta preciosa ciudad.
Free Tour: descubriendo los secretos históricos de Toledo
Los “Free Tours” o “Tours gratis” se están poniendo de moda. Es una modalidad donde el guía ofrece en principio su trabajo de forma desinteresada, esperando que sean los propios viajeros los que valoren (con dinero obviamente) cuál es el precio del tour. Lo habitual es hacer primero este tour y luego si acaso complementarlo con algún otro, pero nosotros lo hicimos al revés ya que nos lo recomendaron por la noche.
Con un grupo más o menos numeroso comenzamos nuestra segunda ruta guiada del viaje con Rutas de Toledo. La guía se veía como una entusiasta de su ciudad y tenía ganas de enseñarla. Mientras nos llevaba y descubría rincones, nos iba complementando con explicaciones históricas. Pero todo hay que decirlo, lo hacía de una forma perfecta en la que no cargaba demasiado con información y añadía anécdotas y curiosidades para hacer todo más ameno. El primer sitio curioso y que no habríamos descubierto por nuestra cuenta es una iglesia que se ha transformado en discoteca.
Uno de los personajes que apareció mucho durante la ruta fue Bécquer. Y es que muchas de las historias y leyendas de la ciudad que él escribió tenían su reflejo y encajaban perfectamente en la ruta. Está el ejemplo de la leyenda de las tres fechas, donde Bécquer se enamoró de una joven a la que persiguió durante un tiempo. Cuando por fin la encontró y la identificó, solo pudo ver como se ordenaba y se metía en un convento, no pudiendo hacer nada él para evitarlo.
Aunque la ruta de Toledo Mágico y el Free Tour no tenía nada que ver, era curioso ver como conectaban en algunos puntos; haciendo que muchos rincones estuvieran tan cargados de sucesos mágicos y leyendas, como de acontecimientos históricos. El tour acaba en la misma oficinas de Rutas de Toledo donde nos pudimos hacer una foto con el “Hombre de Palo”, un autómata creado por la única persona que fue capaz de hacer subir mediante mecanismos automáticos el agua del Tajo a las casas. Al no pagarle el rey, destruyó los planos y para sobrevivir creó el “Hombre de Palo”, el cuál es querido por todos los toledanos.
Fue un acierto total haber encontrado a Rutas de Toledo. Hacen un trabajo genial y sus guías se ve que tienen ilusión y conocimiento a partes iguales. Como vivimos en Madrid y estamos cerca de Toledo, volveremos para hacer algún tour más; el precio está genial y son muy divertidos. Ruskomendamos a todos los que visiten Toledo que al menos hagan el Free Tour con Rutas de Toledo, y que si se ven con tiempo complementen con alguno de los muchos que tienen aparte. ¡El próximo será el de los templarios!
Nosotros también hicimos la ruta del Toledo mágico y nos encantó ¡Totalmente recomendable!
¡Un saludo!