El Barrio de Salamanca es historia, belleza, ambiente y tapas

Quizá producto de la nostalgia o como agradecimiento a los buenos años en el Barrio Salamanca. El caso es que no me podía dejar de describir lo que este barrio ofrece a quien lo visita. Es un barrio en el que hemos vivido durante dos etapas, y que después de Pintor Rosales es nuestra zona favorita de Madrid. Siempre pensamos que el Barrio Salamanca está cargado de improvisación fuertemente mezclada con su destacado clasicismo. Quizá por ello, por trasladarnos continuamente de época en época paseando por sus calles, quedamos prendados.

Aunque siempre decimos que no queremos ni nos atrae competir con Wikipedia, que ya todos la conocéis, daremos una pincelada histórica. El Barrio Salamanca fue construido como resultado del plan urbanístico de Castro de 1860 y dado por finalizado en 1927. Antes de estas fechas, la zona era más bien un campo a los alrededores de Madrid. Lo que era la ciudad de Madrid empezaba en unas puertas a la altura de la actual plaza de Colón. El barrio recibe su nombre por su constructor malagueño (seguramente un primo lejano de Rusko), José de Salamanca y Mayo.

Si algo me ha impresionado siempre del Barrio Salamanca es su arquitectura. La zona se caracteriza por casas con amplios portales para carruajes, patios interiores y balcones con rejas decorativas. Es por ello que cada vez que paseábamos de vuelta a casa o para comprar el pan, nos sentíamos en un museo arquitectónico de otra época. ¡Y si tenéis la oportunidad de entrar a las casas y patios interiores, entonces sí que vais a alucinar! Otra característica del Barrio Salamanca es que siempre hay gente en la calle, ¡y de todas las edades!

Pasear por el Barrio Salamanca es fácil. Evidentemente no os voy a descubrir la belleza de la Puerta de Alcalá, del Parque del Retiro o la Plaza de Colón (al menos no en este artículo). También soy consciente de que conocéis de sobra la actividad comercial de la Calle Serrano, famosa en el mundo entero. Yo os voy a animar a callejear por sus bocacalles, ya que quedaréis prendados por los detalles de las casas. Aquí sí que podría aplicar la frase de mi abuelo…”ya no construyen como antes.

¡Y cómo no! Si el Barrio Salamanca destaca por algo es por las terrazas, los bares de tapas y los restaurantes de la zona. No son pocos los sitios que podría nombrar. Existen numerosos sitios donde hemos brindado, donde hemos desahogado las penas después del trabajo, donde hemos disfrutado y comido a gusto, pero como es un post emocional me quedaré con los yo que nunca olvidaré. Si esto sirve para que más gente los conozca mejor, si no que sirva como humilde gratitud.

Este es el homenaje al buen trato y a la paciencia con nosotros durante tantos momentos: Por hacernos recordar nuestra amada Andalucía, El Pescaito (Duque de Sesto, 33). Porque es un placer hablar con estos cordobeses y por sus magníficas croquetas, La Croquetta (Calle Fuente del Berro, 33). Por ser un restaurante que nos conquistó y que consiguió ser elegido Boquerón de Oro 2012, De Pura Cepa (Calle de la Fuente del Berro, 31). Y termino con un sitio muy especial, donde saltó la chispa con Abby por primera vez, por lo que en parte yo creo que fue parte de la llama de El Boquerón Viajero: Starbeers (Calle de Don Ramón de la Cruz, 95).

Mientras paseáis por Barrio Salamanca, contemplad vuestro alrededor, cerrad lo ojos y viajad a otra época. Sentiros parte de la historia, imaginaos entrando con el carruaje por las puertas de las casas, en definitiva sentiros viajeros en el tiempo. Ruskomendamos el Barrio Salamanca con 5 boquerones, por su historia, su belleza y su ambiente. Una opción ideal para disfrutar de esta preciosa zona es alojarse en un apartamento y sentirse uno más viviendo aquí, con la independencia que eso produce. Para ello, una opción muy buena podría ser consultar las ofertas de GowithOh.