El Mercado de San Antón ofrece sabor local, buen ambiente y energía, junto con rica y elaborada comida La primera vez que fui al Mercado de San Antón en Madrid, me agobié. La segunda vez me encantó. Este mercado urbano, en el corazón del famoso barrio madrileño de Chueca (para mí es lo más parecido al Greenwich Village Neoyorquino), tiene tres pisos de puestos donde se venden verduras, hierbas, carnes, quesos, panes y pescados junto con comidas preparadas, tapas y una terraza en la planta de arriba con un restaurante para tomar copas. El ambiente en cada planta es distinto, pero todo funciona en armonía para crear una experiencia única que te dejará buscando una razón para volver.
Continuar leyendo