El Torcal de Antequera se empezó a formar cuando Europa y parte de Oriente medio estaban cubiertas por agua

Durante nuestro viaje a Antequera, una de las visitas obligadas, por su belleza y singularidad, fue al entorno natural de El Torcal de Antequera. Éste es uno de esos lugares con encanto que tanto nos gusta por la cantidad de historias y curiosidades que guarda. Según nos contaron, El Torcal de Antequera se empezó a formar cuando Europa y parte de Oriente medio estaban cubiertas por agua. Entonces los sedimentos se fueron acumulando en diferentes niveles, y que millones de años después tras ir levantándose empezaron a emerger. En la página web de El Torcal de Antequera es posible conocer con más detalle este proceso.

El Torcal de Antequera es uno de los más reconocibles ejemplos de paisajes kársticos. Para los menos entendidos en la materia, como es nuestro caso, decir que un paisaje kárstico es aquel que se forma por la meteorización química de determinadas rocas. La verdad es que me quedé asombrado al ver semejante paisaje, formado por montones de rocas que parecían haber sido laminadas a propósito. Otro de los datos curiosos es que en El Torcal de Antequera, situado en una de las zonas más lluviosas de España, no presentara ningún río, lago o semejante alrededor. El guía nos explicó que las rocas cumple perfectamente la función de esponja.

El Centro de Visitantes de El Torcal de Antequera está perfectamente dirigido y organizan constantemente actividades y excursiones. A veces es importante tomarse tiempo e ir de la mano de algún experto para conocer bien el entorno que estamos visitando, y no quedarnos únicamente con un par de miradas y unas fotos, sin saber muy bien cuáles son exactamente las peculiaridades o anécdotas que se esconden detrás. En este caso he de reconocer que tienen todo fenomenalmente montado y por ello probamos a hacer un par de actividades que nos recomendaron.

La primera de ellas fue la Ruta de los Ammonites, donde pudimos ver las huellas que estos moluscos dejaron millones de años atrás en El Torcal de Antequera. Los ammonites fueron moluscos cefalópodos que existieron hace unos 400 millones de años, ¡vaya casi nada! Durante esta ruta el guía, con mucho conocimiento y pasión por lo que trasmitía, nos explicó el porqué de la formación de las rocas, como se había formado el entorno y lo mejor de todo es que pudimos disfrutar de una agradable ruta de senderismo. Os ruskomendamos, que si hacéis la ruta en verano no vayáis muy pronto porque el calor puede hacerse insoportable. Nosotros fuimos a las 7 de la tarde, y el clima era perfecto.

Tras terminar la ruta a pie cenamos y nos preparamos para una apasionante noche en el Observatorio de El Torcal de Antequera, donde íbamos a aprender sobre la Luna, las estrellas y Saturno. Con un poco de frío (así que ruskomendamos llevarse algo de abrigo) el guía empezó a explicarnos primero como reconocer las estrellas para orientarse y cómo encontrar las principales constelaciones. La pasión y amenidad que el hombre ponía en sus explicaciones, hicieron de esta actividad algo espectacular. Sin duda volvería a repetirlo, y así poder de nuevo pararme sin pensar en nada más que contemplar el firmamento.

No son las únicas actividades y dependiendo de la época del año pueden ir variando, así que ruskomendamos visitar la página para obtener más información. Yo me quedo con la majestuosidad que muchas veces la naturaleza presenta y que la mayoría de las veces ignoramos sin pararnos a conocer más sobre ella. Por eso ruskomendamos con 5 boquerones visitar El Torcal de Antequera y hacer las excursiones y participar de las actividades, para vivir tranquilamente una experiencia que seguro recordaréis.